Regresando de vacaciones

Me pregunto cuantas veces he dejado la hoja en blanco, aun sabiendo o creyendo saber lo que quiero escribir. La maqueta mental que fabrico en mi mente, no es más que un conjunto de ideas desorganizadas que se abalanzan unas a otras tomando una postura conflictiva y confusa que crea un entorno hostil dentro de mi cabeza que no permite que los más increíbles y vagas ideas salgan a flote por el miedo a ser destruidas o lastimadas en su intento de ser escuchadas.

Tiempo, paciencia, determinación y ganas (muchas ganas) es lo que necesito para sentarme frente a una hoja en blanco y empezar a escribir. Suelo dejarme llevar por la idea más fuerte en el preciso instante en el que hago un recuento de ellas. Amor, odio, muerte, fantasía, sueños, creencias, ideas subversivas de cambiar el mundo, son las ideas más comunes en mi repertorio imaginario. Después de muchas noches sin escribir, hoy lo hago porque la licencia de “no hacerlo” ha expirado.
Luego de unas satisfactorias vacaciones frente al mar de un conocido balneario ubicado al norte de Lima, sin dejar de mencionar también, las incontables amanecidas abusando del alcohol y mi jovialidad en las reuniones con amistades conocidas, estoy relajado y ansioso por seguir compartiendo mis nuevos escritos con tod@s mis amig@s lectores del blog. Recuerden que el blog se mantiene vivo gracias a sus comentarios y visitas.

Nos leemos pronto
Con cariño para todos.

ZeroZ

1 comentarios:

Liz Pasco dijo...

Que bueno tenerte de vuelta :)
Leerte siempre me devuelve lo mejor de ti.

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